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viernes, 10 de marzo de 2023

'Science' promueve la paparrucha del racismo inconsciente


Science, uno de los journals científicos más prestigiosos del mundo, acaba de publicar una pastoral sobre el sesgo implícito — esto es, la idea de que todos somos racistas (?), que no nos damos cuenta de que lo somos (??), y todas las potenciales implicaciones que esto tendría, incluyendo la idea de que todas las instituciones son racistas (???), la de que uno puede medir sus niveles de racismo (y otras formas de discriminación) mediante tests de asociación implícita, y hacerse tratar su racismo implícito acudiendo a campamentos de reentranimiento conocidos como "entrenamiento en sesgos". ¡Una pasada, pues!

El artículo, escrito por un tal Rodrigo Pérez Ortega, incluye joyas como:
El IAT [Test de Asociación Implícita] sigue siendo una herramienta estándar para medir el prejuicio implícito, aunque algunos lo han criticado porque hay que realizarlo varias veces para que revele un resultado fiable, ya que las puntuaciones de las personas podrían cambiar cada vez que lo realizan. Incluso cuando los resultados son neutros en cuanto a la raza, la mayoría de los estudios revelan algún tipo de prejuicio inconsciente, como una preferencia no reconocida por determinadas orientaciones sexuales o religiones.

[...]

LOS CIENTÍFICOS llevan mucho tiempo estudiando diversos tipos de intervenciones que intentan " eliminar" los prejuicios implícitos, pero pocas de ellas han demostrado efectos duraderos. "Existe una sólida base científica en torno al sesgo implícito", afirma [Rachel] Hardeman. Sin embargo, "ahora mismo no existe una pauta de referencia sobre cómo intervenir. Está impreso en nuestros cerebros de formas que lo hacen realmente difícil".

[...]

A continuación, el equipo de UnBIASED utilizó un tipo de inteligencia artificial (IA) conocida como aprendizaje de máquinas para analizar patrones en las grabaciones e identificar señales no verbales que pudieran indicar prejuicios implícitos. En una de las grabaciones que le mostraron a [el Dr. Brian] Wood, éste hablaba con un paciente mientras estaba inclinado hacia delante con los brazos cruzados sobre el escritorio, un lenguaje corporal que le preocupa que pueda haberle hecho parecer cerrado e inaccesible. "Reflexioné sobre la forma en que ese lenguaje corporal podía ser percibido por el paciente", dice. Wood, que espera mejorar su comportamiento, dice que agradece estos comentarios y que está deseando recibir más.

[...]

Conseguir la participación de todos los sistemas sanitarios podría acelerar el proceso. Recientemente, los estados de California, Michigan, Maryland, Minnesota y Washington han aprobado leyes que obligan a los profesionales médicos a recibir formación sobre prejuicios implícitos. Y desde junio de 2022, los médicos de Massachusetts están obligados a recibir formación sobre prejuicios implícitos para obtener una nueva licencia o recertificarse para ejercer.
Ohh, vaya, esto es un poco embarazoso — resulta que el racismo inconsciente es un mito, que no ha podido ser replicado mediante verificación independiente. Así es, el dichoso sesgo inconsciente no es más que una idea popular y chupiguay más, que se hizo célebre gracias a la crisis de replicación. Un producto de la negligencia en el quehacer científico, nada más.

Y todas las críticas al Test de Asociación Implícita están más que justificadas porque cualquier test que ofrezca resultados salvajemente dispares entre una toma y la siguiente tiene la consistencia de un flan, y al no ser fiable, carece de cualquier validez, y merece ser criticado hasta el agotamiento.

Ahora bien, que haya gente que se dedique a ofrecer soluciones científicas a problemas imaginarios no es algo completamente nuevo, y normalmente no es demasiado alarmante — las personas pueden desperdiciar su tiempo como les plazca, y mientras no dañen a terceros, que lo aprovechen; al fin y al cabo, pocas cosas producen un subidón de dopamina tan bueno como el sesgo de confirmación. Claro, yo no me dejaría tratar por estos profesionales de la salud, pero eso ya va en cada uno. Y que haya políticos aprobando regulaciones absurdas, basados en pseudociencia y la ignorancia, es casi que hasta un requisito del cargo.

Lo que es relativamente nuevo, y no tan ordinario, es que uno de los journals científicos más prestigiosos del mundo, de larga estancia y de alto factor de impacto, decida utilizar su reputación como parangón del conocimiento acumulado mediante la revisión por pares para travestir como verdadero un concepto que falló esa misma revisión que ha dotado de corpulencia el prestigio de Science.

Y no es que las instituciones humanas deban ser infalibles. Estoy seguro que esta no será la última vez que Science meterá la pata, como de seguro también lo harán los otros journals de gran prestigio. Aquí el punto es doble: el primero, es que no parece que los journals científicos hayan establecido salvaguardas para prevenir capturas ideológicas por parte de doctrinas populares, lo que los hace vulnerables a estar publicando constantemente basura alineada con la ortodoxia de turno... como vimos que durante toda su historia lleva haciendo Nature, la competencia de Science.

El segundo punto es que no parece ser casualidad que la anticiencia promovida en Nature hoy en día se encuentre ideológicamente alineada con la pseudociencia promovida en Science. No creo que en este momento ninguno de los dos journals esté condenado de manera irredimible, pero sí se va haciendo tarde para corregir el curso, so pena de que cada vez se vuelva más difícil identificar lo que es verdadera ciencia de lo que es propaganda ideológica. ¿Y cómo vamos a saberlo exactamente, si las instituciones encargadas de dirimir entre lo que es verdadero y lo que es falso parecen estar abdicando voluntariamente su deber fiduciario en favor del fervor religioso que confiere la sensación de superioridad moral?

Bueno, por lo menos todos seremos etiquetados como racistas "tolerantes".

(vía Why Evolution Is True | imagen: Science)

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Publicado en De Avanzada por David Osorio | Síguenos o apóyanos en Patreon para no perderte las próximas publicaciones

sábado, 15 de octubre de 2022

¿La captura ideológica de 'Nature'?



Hace unas semanas comenté que la empresa de publicación 'científica' Nature estableció un estándar de pureza ideológica para publicar en sus páginas — un cambio editorial en el que ahora se reservan el derecho a rechazar estudios rigurosos o retractarlos a posteriori si consideran que su publicación podría suponer un daño "potencial" para poblaciones vulnerables. Un cambio que abraza la ortodoxia moral del momento, y, con ella, la más elemental ignorancia sobre la ciencia y sus virtudes.

Pues Nature no es nada si no es consistente. A pesar del torrente de críticas sobre esto, la empresa editorial parece empeñada en redoblar su apuesta a la corrección política, así que desde entonces nos han obsequiado más disparates sobre —cómo no— las maldades de la ciencia y el mundo académico.

viernes, 2 de septiembre de 2022

'Nature' establece estándar de pureza ideológica para publicar



La empresa de publicación 'científica' Nature acaba de publicar una nueva guía ética de publicación en la que se reservan el derecho a rechazar estudios rigurosos si consideran que su publicación podría suponer un daño "potencial" para poblaciones vulnerables:

miércoles, 3 de noviembre de 2021

Matonean a Richard Dawkins por decir que el sexo es binario



Hace unos meses Richard Dawkins fue condenado por varias organizaciones ateas por la osadía de invitar a una conversación sobre los paralelos entre la identidad racial y la identidad de género, que en los rincones más podridos de la izquierda regresiva es algo equivalente al sacrilegio. Un auto de fe por blasfemia en toda regla.

Por estos días, Dawkins está promocionando su más reciente libro, Flights of Fancy, y como parte de la gira está siendo entrevistado por varios medios; una de esas entrevistas fue la que le concedió a The Times, en donde le preguntaron sobre estas recientes controversias — la entrevista se titula Richard Dawkins: "La raza es un espectro. El sexo es condenadamente binario"

Pues las criaturitas que viven de promover el odio contra Dawkins se dieron un festín de indignación y varios subidones de dopamina cuando de la entrevista se desprende que todo el matoneo del mundo no ha servido para cambiar la opinión del biólogo (por si el título no hubiera sido suficiente pista) — con este extracto ya estaban salivando:

miércoles, 29 de septiembre de 2021

Editor emérito de 'Science-Based Medicine' critica su distanciamiento de la ciencia rigurosa



Esta es una traducción libre del artículo An Emeritus Editor At Science-Based Medicine Just Sent This Letter To Steven Novella Criticizing The Site's Recent Turn Away From Rigorous Science, por el doctor Kimball Atwood, publicado originalmente el 25 de septiembre de 2021 la columna Singal-Minded, del periodista científico Jesse Singal.

[Jesse Singal:] Con permiso, comparto el siguiente correo electrónico que Kimball Atwood, un editor emérito de Science-Based Medicine, acaba de enviar a Steven Novella, el editor del sitio (David Gorski fue incluido en el correo electrónico, al igual que yo y un número de otros críticos de la reciente cobertura de SBM sobre disforia de género juvenil).

Si no tienes ni idea de lo que estoy hablando, mira aquí y aquí.


domingo, 27 de junio de 2021

Reseña del libro: 'Daño irreversible: La moda transgénero que seduce a nuestras hijas', de Abigail Shrier



Esta es una traducción libre del artículo Book Review: Irreversible Damage: The Transgender Craze Seducing Our Daughters, by Abigail Shrier, por la doctora Harriet Hall, publicado el 15 de junio de 2021 en Science-Based Medicine, y posteriormente retractado por los editores de ese sitio, porque el artículo de Hall no es políticamente correcto — tras esta cobarde retractación, la reseña fue republicada en Skeptic Magazine.


miércoles, 11 de noviembre de 2020

Ubisoft modifica 'Watch Dogs: Legion' por presión políticamente correcta



El 29 de octubre de 2020, Watch Dogs: Legion, la tercera entrega de la serie de videojuegos Watch Dogs, de Ubisoft, llegó a las estanterías. El juego está ambientado en un Londres futuro y distópico, centrándose en el grupo hacker DedSec, que busca limpiar su nombre mientras contrarresta a la empresa de vigilancia privada que ha sido contratada por el gobierno británico para que monitoree en todo momento a los ciudadanos — el juego tiene una marcado tono de resistencia al fascismo y a Gran Hermano (algo que está en consonancia con la serie). Lamentablemente, parece que la resistencia al pensamiento único se queda confinada a la trama del juego, mientras que en la vida real a Ubisoft le queda grande estar a la altura de sus protagonistas.

Resulta que dentro del juego, uno puede sintonizar los podcasts de la resistencia (algo parecido a cómo funcionan las estaciones de radio en Grand Theft Auto) y escuchar a periodistas reales hablando sobre cómo volvió el fascismo a Gran Bretaña. Para esto, Ubisoft reclutó a comentaristas políticos y periodistas, para que grabaran ese contenido. Entre otros, llamaron a Helen Lewis del Atlantic, quien grabó dos piezas como podcast de la resistencia. En una de las grabaciones dice:

lunes, 24 de agosto de 2020

Epístolas sobre libertad de expresión y límites del humor

 
Desde que Alejandro Vázquez Azpilicueta fue invitado al podcast Herejes al episodio sobre los límtes del humor, supe que me caería bien — durante todo el episodio estuve asintiendo y agradeciéndole su defensa integral de la libertad de expresión. Pocas veces tengo la oportunidad de coincidir tanto con alguien a quien no le puedo dar retroalimentación inmediata; es una experiencia muy grata, especialmente en los tiempos que corren.

Tras publicar mi reseña sobre el podcast, Alejandro se puso en contacto conmigo y entablamos una conversación sobre libertad de expresión y los límites del humor.

Consideramos que el intercambio podría ser de interés para más personas, así que acudimos a la red social Letter, creada con el propósito específico de que las personas puedan intercambiar puntos de vista honestamente, ofreciendo contexto y argumentos, en vez de conclusiones gratuitas — Letter es lo contrario a Twitter: mientras la red del pajarito sólo permite 280 caracteres y está diseñada para causar subidones de dopamina a punta de hacer las interpretaciones menos caritativas, Letter pretende recuperar las ventajas de la comunicación epistolar de antaño, donde las personas se extendían para ofrecer argumentos y trenes de pensamiento coherentes — cada carta tiene un límite de 1000 palabras. Mi primera experiencia en Letter fue con mi amiga Gretchen Mullen, con quien discutí sobre cómo el posmodernismo destruyó el movimiento ateo (o nuevo ateísmo).

A la hora de escribir estas líneas, con Alejandro hemos intercambiado un total de cinco cartas en las que hemos explorado los más recientes episodios de censura y los constantes ataques bajo los que se encuentra hoy en día la libertad de expresión, entre los que hemos examinado la tendencia de decir que las palabras son violencia (y su mantra gemelo, de que el silencio también es violencia), la intolerancia promovida e impuesta desde el New York Times, el debate sobre si el Estado es el único que puede ejercer censura o si los ciudadanos privados y las empresas también pueden incurrir en ella, hablamos sobre lo absurdo de no tener en cuenta el contexto y la intención a la hora de juzgar algo como racista, mencionamos cuál creemos que es la mejor comedia de televisión (está entre Community y The Office), hablamos sobre el delirio de que los actores de voz sean de la etnia de los personajes, y el problema que supone la cultura de la cancelación, en inglés cancel culture, para una sociedad libre y democrática — aquí hay unos cuantos extractos de nuestras cartas, aunque los invito a leer todo el intercambio:

jueves, 23 de julio de 2020

Cuando los woke y los racistas coinciden en todo



Creo que lo que realmente consiguió que viera la corriente woke como un retorno al más rancio racismo y otras formas de discriminación fue la exigencia que hace unos años empezó a popularizarse entre movimientos universitarios americanos que exigían el regreso de espacios segregados por raza en los campus — las políticas de Jim Crow disfrazadas de progreso.

Desde entonces, para mí cada vez es más evidente que sin importar la variedad de las políticas de identidad, todas (sea el supremacismo blanco, la Nación del Islam, o el feminismo interseccional) conducen a lo mismo, porque su premisa es la misma: conseguir que la sociedad y sus leyes se basen en un esencialismo semi-biológico. Había pensado en escribir un post largo y detallado al respecto, que ilustrara el punto, pero da la fortuita casualidad que alguien se me ha adelantado y ha expuesto el punto de manera concisa y humorística.

Desde el lunes, el video When Wokes and Racists Actually Agree on Everything del comediante Ryan Long ha rondado las redes sociales con justa razón, porque deja al descubierto que los postulados woke son virtualmente indistinguibles de los de los supremacistas blancos:

sábado, 20 de junio de 2020

¿Podemos alejarnos del borde del abismo?



Esta es una traducción libre del artículo Can We Pull Back From the Brink? de Sam Harris; el artículo es una transcripción literal del episodio 207 de su podcast Making Sense, que se titula igual, publicado el 12 de junio de 2020:

viernes, 12 de junio de 2020

Ahora todos vivimos en un campus universitario americano



Cualquier persona que le siga la pista —aún de lejos— a la política y cultura americanas sabe que desde hace unos años se ha venido dando un giro en la guerra cultural, y que, más pronto que tarde, lo que solía ser un enfrentamiento entre liberales (o progresistas) y conservadores —o izquierda y derecha— se ha venido convirtiendo en un enfrentamiento entre lo que podríamos llamar un libertarianismo civil de corte democrático contra el autoritarismo, con personas de derechas e izquierdas en ambos lados.

Cuando empezamos a notar el cambio, por ejemplo con estudiantes haciendo protestas para que las universidades cancelaran invitaciones a distintos personajes a dar discursos o exigiéndoles que prohibieran invitados de otras asociaciones de estudiantes (por ejemplo, revueltas para cancelar a Ayaan Hirsi Ali, Maryam Namazie y Bill Maher) la respuesta más común a las denuncias de estos excesos era la acusación de "conservador" (?), aunque los menos deshonestos minimizaban el hecho diciendo que así era la vida en los campus de las universidades americanas, y que realmente no valía la pena darle tanta importancia pues esos estudiantes intolerantes ya aprenderían una vez se graduaran y les tocara empezar a construir una trayectoria profesional en el mundo "real", donde sus disparates no serían tolerados.

Pues bien, llegó el momento y, a juzgar por los eventos de la última semana, parece que ninguno de esos antiguos estudiantes fue notificado de que su rebelión sin causa y desprecio por las libertades ajenas debían quedarse en su fuero interno.

viernes, 15 de mayo de 2020

Marcha por la Ciencia 2020: contra la objetividad



Desde que en 2017 apareció la Marcha por la Ciencia, mi ilusión inicial se convirtió rápidamente en frustración cuando vi que sus organizadores están más interesados secuestrar el interés por la ciencia para avanzar surtidas agendas políticas reaccionarias, que hasta ahora han incluido el disparate de la interseccionalidad, la defensa del Daesh, el buensalvajismo, la corrección política (!) y una incontenible diarrea retórica sobre lo que quiera que sean las malvadas "estructuras de opresión" y cómo el hecho de que grupos históricamente discriminados no hagan tantas contribuciones a la ciencia necesariamente se traduce algún tipo de intolerancia institucional y deliberada en la ciencia (?). Sí — es en serio, dicen eso.

Todos estos sinsentidos tienen un común denominador: es posmodernismo. Y si fuéramos a resumir el posmodernismo en una sola frase, esa sería que la realidad objetiva no existe.

Así que para sorpresa de nadie, para la Marcha por la Ciencia 2020, el capítulo de Nueva York (la Marcha principal) anda compartiendo un artículo sobre cómo la la objetividad es mala, porque sí:

jueves, 2 de abril de 2020

Christopher Hitchens, anti-identitario



Esta es una traducción libre del artículo Christopher Hitchens, Anti-Identitarian, por Matt Johnson, publicado en Quillette el 12 de marzo de 2020:

domingo, 22 de diciembre de 2019

J.K. Rowling a la hoguera



A principios de 2019, el think-tank Centre for Global Development (CGD) no le renovó el contrato a la activista por los derechos de las mujeres y renombrada investigadora de impuestos Maya Forstater por tuitear en su cuenta personal la muy 'radical' opinión de que biológicamente los "hombres no pueden volverse mujeres". Forstater demandó al think-tank por despido injusto y, en lo que seguramente será un precedente de pesadilla para la estabilidad laboral en Reino Unido, el juez falló contra Forstater porque, aparentemente, en Reino Unido se puede despedir a la gente por opinar cosas demostrablemente ciertas que personas propensas a sentirse ofendidas podrían encontrar "ofensivas y excluyentes".

Una mancha como un castillo en la tierra de Darwin y Hitchens, que posiblemente no habría trascendido más allá de las fronteras británicas de no ser porque J.K. Rowling, la autora de los libros de Harry Potter, manifestó su desacuerdo con la sentencia:

jueves, 11 de julio de 2019

"¡Rechazo su hipótesis!"



A finales de julio se llevará a cabo el lanzamiento mundial de la novena película de Quentin Tarantino, Once Upon a Time... in Hollywood, una ucronía en clave de dramedia que narraría los días que precedieron al asesinato de la actriz Sharon Tate en agosto de 1969 a manos del culto de Charles Manson; los hechos son contados a través de los vecinos de Tate — el actor Rick Dalton y su doble de acción Cliff Booth, interpretados respectivamente por Leonardo DiCaprio y Brad Pitt.

jueves, 2 de mayo de 2019

Marcha por la Ciencia 2019: regresa el posmodernismo



En 2017, una de las respuestas a la elección de Donald Trump fue la organización de una Marcha por la Ciencia — en principio, esta es una buena idea, en vista de la voracidad de Trump por desarrollar políticas públicas populares que desafían el conocimiento humano acumulado. El asalto de Trump a la ciencia merecía una respuesta de esta magnitud; sin embargo, más pronto que tarde, resultó que quienes organizaban la Marcha por la Ciencia estaban más interesados en promover teorías conspiranóicas como la de la interseccionalidad y su filofascista interpretación de lo que es la "diversidad", y en su celo ideológico llegaron a defender al Daesh y acusar a la ciencia de ser la directa responsable del lanzamiento de la bomba MOAB. Con esos defensores, para qué enemigos.

A pesar de esto —o, en parte como resultado; vaya uno a saber en estos días— la Marcha fue un éxito, así que hubo una convocatoria en 2018: esta vez escondieron un poco sus disparates woke, y prefirieron limitarse al buensalvajismo y la corrección política; de nuevo consiguiendo convocar a miles de personas.

Pues este sábado 4 de mayo —el mismísimo día de Star Wars— se llevará a cabo la Marcha por la Ciencia 2019 y, me temo, no traigo buenas noticias.

viernes, 15 de marzo de 2019

Iglesia Católica exige disculpa por comparación con R. Kelly



R. Kelly es un rapero americano que va de un escándalo sexual a otro, y a lo largo de los años ha sido acusado por varias mujeres de haber abusado de ellas, incluso cuando eran menores de edad. En enero de 2019 se transmitió la miniserie Surviving R. Kelly, que entrevista a las presuntas víctimas del artista — después de la transmisión la Fiscalía de Illinois le imputó 10 cargos.

Saturday Night Live (SNL) es un programa de televisión estadounidense que a menudo parodia la cultura y la política contemporáneas; uno de sus segmentos es Weekend Update, presentado por Colin Jost y el comediante Pete Davidson.

En un episodio de Weekend Update la semana pasada, para introducir el tema de artistas musicales acusados de abuso sexual —específicamente R. Kelly y Michael Jackson—, Davidson hizo la siguiente broma mencionando a la Iglesia Católica (del 00:10' al 00:45'):

lunes, 25 de febrero de 2019

Cafe Tacvba ya no toca 'Ingrata'



En una de esas reuniones de amigos en las que se carga YouTube y cada uno empieza a pedir una canción para improvisar karaoke y recordar momentos, uno de mis amigos pidió Ingrata de Café Tacvba.

Antes de que la canción empezara, alguien mencionó que era una lástima que Café Tacvba hubiera decidido no volver a tocar el tema en sus conciertos. Cuando pregunté por qué, mi amigo dijo que por las letras. En ese momento no le dí mayor importancia, la canción empezó y la cantamos:

lunes, 28 de enero de 2019

Informe EAT-Lancet, activismo veg disfrazado de ciencia



La semana pasada se publicó el informe EAT-Lancet, producto de la comisión creada entre la prestigiosa revista médica The Lancet y la Fundación EAT, supuestamente para evaluar el impacto de la dieta en la salud humana y en el planeta. Grosso modo, la conclusión del informe fue que todo el mundo debería renunciar a la carne y pasarse a una dieta basada en plantas, con la inmodesta pretensión de "salvar el planeta" y mejorar nuestra salud.

Hay motivos para tomarse el informe con una buena dosis de escepticismo. En primer lugar, porque la mejor evidencia disponible hasta la fecha no permite concluir que la dieta basada en plantas sea la mejor decisión en salud; la evidencia más rigurosa sustenta la idea de que la carne roja no causa ninguna enfermedad y, a la vez, no es poca la evidencia que apunta a que las dietas bajas en comidas animales son nutricionalmente deficientes. Es un poco sospechoso que los hallazgos del informe EAT-Lancet contradigan lo que hasta ahora es la mejor evidencia disponible.

miércoles, 3 de octubre de 2018

CERN suspende profesor de Física por políticamente incorrecto



El Consejo Europeo para la Investigación Nuclear, conocido como CERN (sigla para Conseil Européen pour la Recherche Nucléaire), es una organización de investigación europea que opera el mayor laboratorio de física de partículas del mundo. Entre el 26 y el 28 de septiembre, el CERN celebró un taller sobre la Teoría de Altas Energías y Género, centrado en los últimos avances en física de partículas y cosmología, y debatió cuestiones de género e igualdad de oportunidades en este ámbito.

De 38 presentaciones, hubo una que se atrevió a cuestionar el dogma de que las mujeres son discriminadas en la ciencia — la presentación del profesor de la Universidad de Pisa Alessandro Strumia.

Al CERN no le hizo ninguna gracia el desafío de Strumia y —en una reacción más propia de la Inquisición que de una organización con espíritu científico— suspendió al profesor Strumia y le abrió una investigación: